RCP + primeros auxilios en todas edades
Contenido del Curso
- Bienvenido al Curso
- Emergencias médicas
- Precauciones universales
- Paro cardíaco
- Asfixia
- Control de sangrado
- Lesiones
- Enfermedad repentina
- Emergencias por calor y frío
- Prevención
- Conclusión
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Empieza yaLas hemorragias nasales, médicamente conocidas como epistaxis, pueden tomarnos desprevenidos. Sin embargo, suelen ser bastante inofensivos y, por lo general, pueden controlarse fácilmente. Hoy, hablaremos sobre la forma correcta de manejarlas. Pero antes de continuar, ten en cuenta que, si bien la mayoría de las hemorragias nasales son benignas, hay algunas excepciones. Si una hemorragia nasal es intensa, y continúa durante más de 20 minutos o se combina con otros síntomas, se debe buscar atención médica inmediata. Es importante tener en cuenta que si alguien toma anticoagulantes recetados, el riesgo de una hemorragia continua aumenta significativamente ya que estos medicamentos pueden intensificar el sangrado y desafiar las técnicas de control estándar, por lo que es importante y recomendable que estos pacientes busquen más atención médica. Ahora, veamos cómo tratar al paciente. En primer lugar, tranquiliza a la persona afectada y haz que mantenga la calma. Pídales que se sienten y se inclinen hacia adelante ligeramente, ya que esto ayuda a evitar que la sangre gotee por la parte posterior de la garganta. Una inclinación hacia atrás podría provocar posibles complicaciones como aspiración y vómitos. Una vez que te pongas los guantes, o si el individuo puede hacerlo por sí mismo, pellizca la sección blanda de sus fosas nasales justo después del hueso nasal. Esto debe mantenerse durante aproximadamente 10 a 15 minutos sin soltar presión. Este simple acto aplica presión sobre los vasos sanguíneos de la nariz y ayuda a facilitar la coagulación. Si hay sangre acumulada en la boca o la garganta, podemos indicarles que escupan con cuidado en lugar de tragar. Es importante contener la salpicadura de sangre durante este proceso, la cual puede estar asociada con estornudos, tos, escupir o hablar. Puede ser necesaria protección para los ojos junto con una máscara y guantes para proteger completamente al proveedor de atención y de manera adecuada. Si no hay EPP disponible, asegúrate de permanecer a un lado del paciente y no frente a su cara, ya que esto puede ayudar a proteger al proveedor. Es importante tener en cuenta que, si bien una compresa fría puede ayudar a contraer los vasos sanguíneos, la sangre fría no coagula rápidamente. Si optas por utilizar una bolsa de hielo, se sugiere colocarla en el puente de la nariz o en la parte posterior del cuello. Una vez que se detenga el sangrado, anime al paciente a resistir la tentación de sonarse la nariz, ya que esto puede desalojar el coágulo y hacer que la nariz comience a sangrar nuevamente. Un error común es tapar la nariz con una gasa o un pañuelo. Esto debe evitarse en un escenario de primeros auxilios y recuerda, sólo un médico debe decidir sobre el taponamiento nasal médico. Y, para aquellos pacientes que puedan estar tomando anticoagulantes, es posible que sea necesario mantener la presión por más tiempo y que sea necesaria la intervención de un médico. Con estos métodos de primeros auxilios, la mayoría de las hemorragias nasales se pueden controlar fácilmente. Pero recuerda, el sangrado persistente, los episodios recurrentes o síntomas o complicaciones adicionales pueden requerir atención médica inmediata a través del 911.